segunda-feira, setembro 21, 2009

Odisea

Estaba sorprendida del sueño que tenía :D Se lo debía a mi mamá quien casi casi se ahoga con su propias saliva... es un decir, la verdad es que se lastimó la rodilla y se quedó a descansar en casa; fui a ayudar a mi papá. Mi hermana llamaba para recordarme todos sus pendientes, que no se me olvidara tal o cual cosa. Había muchas embarazadas, cerca de nosotros había dos muchachitas, vi pasar a unas cinco más... ¿No se han enterado que el mundo ya no aguantará a más humanos por mucho tiempo? Bueno, hay gente muy optimistas y seguro piensan que el agua potable es muy fácil de conseguir y que eso de que el petróleo es recurso no renovable es mentira. Ni qué decir del calentamiento global.

Mi padre indicó que iba a llover, que nos apresuráramos para regeresar a casa, como eso era justo lo que quería, me apuré. Sin embargo, nos agarró la lluvia (sí, con sus garras) y aquello parecía una lluviecita normal, común y corriente, no había problema. Todos seguíamos muy contentos cuando menguó un ratito... pero después volvió a caer y de qué manera!!! Sé que ya nadie se sorprende con todo eso que ha pasado en la tele sobre las inundaciones (¡¡¡y con aguas negras!!!) en diferentes lugares, pero vivir algo así es impresionante (que me impresiona, no que sea muy bueno). Ahí siempre ha habido problemas con esto de los encharcamientos, como hay muchas bajadas (y por lo tanto subidas) el agua llega a un punto donde el drenaje no da para tanto, parece que no hay otra opción de coladera más arriba. Pues se supone que están arreglando ahí, por eso hicieron un hoyo grande, un relajo con montones de piedras y lodo, pero el río que se formó de aproximadamente 10 metros de ancho (7, para no exagerar, pero creo que me quedo corta) en unos 20 minutos, era demasiado para ese intento de coladera... Se formó una laguna profunda, de casi un metro de profundidad, de unos 50 m de diámetro (sí, sí, quizás exagero). El río llevaba a su paso cosas muy pesadas además de lodo y algunas piedras. Me mojé, no me metí al río ni a la laguna. Pero seguía lloviendo y ante esto sólo pensaba en salir de ahí lo antes posible. Veía a lo lejos a algunos hombres sacando cosas que quedaron en la laguna, cruzaban de un lado a otro llevando cosas, el agua les llegaba arriba de la cintura. No sé quienes eran, pero quizás después sepa y la verdad se merecen un reconocimiento. Por otro lado, no dejé de alegrarme un poquito (así es mi mente de malvada) porque en medio del río quedaron unos tipos que me caen muy mal...

Por fin salimos, parecía que ya dejaba de llover. Estaba empapada. Llegué a trabajar con el cabello mojado y regresé igual. Camino a casa tuvimos que evitar una superlaguna que ya sabemos se forma en una "cunita" de la avenida principal, pero había otra que teníamos que pasar forzosamente, después, en una vuelta, había otra, también inevitable... no tan grande. Íbamos por un circuito bastante oscuro, con la lluvia no se veía nada y aunque despacio, todo estuvo bien. Santa Teresa y periférico estaban cerrados, se veía mucho tráfico hacia el sur (a esa altura, nosotros tenemos que agarrar hacia el norte), seguimos hacia Boulevard de la Luz y agarramos Paseos del Pedregal, o lo que supusimos era eso, lugar por demás oscuro, sin señalamientos, que no conocemos bien pues no pasamos frecuentemente y que nos llevó hasta una laguna muy grande (la tercera y última que pasamos). Estuvimos a punto de regresar y seguir buscando, pero al final decidimos aventurarnos y pasar. Sobrará decir que sí pasamos jeje, bueno, ya lo escribí. Salimos al periférico, o sea que en algún lugar nos desviamos de la ruta que según nosotros, íbamos a tomar. Había tráfico, incluso dentro de periférico. Un auto descompuesto, supusimos... pero antes de llegar a Avenida Toluca todos se salían del Periférico (nosotros ya íbamos por afuera), porque dentro era una presa (jajaja) de ambos lados, incluso había un auto negro en medio de todo. El agua escurría cual cascada por los bordes hacia la lateral, estuvimos a punto de desviarnos... Ya estábamos cerca... y después de tres lagunas y una cascada, llegamos sin más.

Así transcurrió otro domingo.

Sem comentários: