sexta-feira, janeiro 09, 2009

De nuevo.


Nuevamente terminó un ciclo, arbitrario como todos en la vida. Es un nuevo año y espero seguir escribiendo aquí, cosas más interesantes pues el año pasado no hubo muchas cosas buenas. Yo soy una mujer que se la vive en el pasado, recordando siempre, ojalá que eso poco a poco vaya cambiando y cultivando nuevas experiencias.

No recuerdo bien cuándo sucedió, pero creo que en fin de año, después de llamarle a mi primo en EEUU, de escuchar su voz tan triste por la pérdida de su madre y que estaba realmente sorprendido y contento por saber que lo recordamos. Fue entonces cuando no quise seguir enojada con él. Y entonces le hablé, ya no lo recriminé más con mis hermanas ni le dije nada malo. Me toca ser más reservada en mis cosas si no quiero que nadie las use para perjudicarme. Y sí, el plan sigue en pie. Con o sin ayuda, aunque yo me haga ilusiones de que las cosas serán color de rosa. Algo bueno tendrá. No sé si fue sólo mi percepción, pero creo que sí estaba triste, ya después lo escuché hablar más.

Como casi cada fin de año, nos fuimos a dormir temprano, creo que justo me metía debajo de las cobijas cuando escuché todo el ruidero de cohetes y gritos porque eran las 00:00 hrs del nuevo año. Yo sólo quería dormir. Para la cena del 31 preparé muchas cosas ricas. Toda la cena la preparé yo y sólo escuché "qué buena te salió la sopa... el pavo... la pasta... los postres". El negrito en el arroz fue el ponche, pero mejoró al día siguiente. Y claro está que no todo lo comimos esa noche... era demasiado.

Antes de que terminara el año, el 30 de diciembre, fui nuevamente a donar sangre para el papá de una persona a quien ni conozco... bueno, yo puedo, mi sangre se recupera en 45 días totalmente, o sea que aún no puedo donar otra vez. Así que el año pasado fueron 3 donaciones... creo que venderé mi sangre jajaja. Como siempre pasa, esperé una llamada que nunca llegó, como me lo imaginé, le pedí a mi sobrina que me acompañara a eso de la "sangrada" y bien lindísima que se vió, porque dijo que sí sin más ni más. La manía que tengo últimamente de querer estar acompañada. Antes no era así, aunque para eso de la sangre sí lo creo conveniente, por si el donante (o sea yo), se sintiera mal. Hubo tres eventos sociales a los cuales no asistí justo porque iría sola. Sé que eso estuvo mal, pero ni modo. La decisión se tomó y ya.

Y todo eso pasó en el fin de año. Mi hermana se lastimó el tobillo y tuve que estar cuidándola. Ya hasta parece maldición, yo no estudié para enfermera jaja. Mi pantorrilla resintió tanto trabajo de fin de año y debe de seguir bien cuidadita.

¿Y a ustedes cómo les va de inicio de año?

P.D. La foto de arriba es de mi nuevo cultivo de jitomate que intenta remediar todo el tiempo perdido... esa es una historia que poco me enorgullece, pero son las fotos más recientes que tengo, ahí está la cámara, esperando a que vuelvan a surgir las ganas de hacer foto de todo lo que veo.