quarta-feira, julho 05, 2006

Globos

La semana pasada, en el metrobús iba un muchacho (muy enamorado, supongo) con un globo metálico enorme, en forma de corazón y con un dibujito de Cowco y leyenda de "Te quiero mucho". Iba feliz. Lo más sorprendente fue ver la sonrisa de cada persona que lo veía. Podría pensar que era risa de burla, pero me inclino más a pensar que era una sonrisa de "ternura", de ver a alguien en una situación tan graciosa, y seguramente llena de ilusión.

¿Por qué dan tanta felicidad los globos? Mi sobrina hace muy poco estaba vuelta loca aprendiendo a jugar en la sala con un globo, sin que se le cayera, ahora ya podía tenerlo en el aire más tiempo, siempre le han gustado los globos y no creo que haya niño que no le agraden. Jajaja, en las reuniones grandes de muchachitos nunca falta el condón inflado que funciona como globo... cómo reviven su infancia, caray!

A mí sí me gustan los globos ¿Y a tí?

1 comentário:

Bernardo Felipe Martínez Meave disse...

A mi no me gustan... Prefiero estar sin globos.