Carta

Había estado esperando una carta. Estaba preparando mi comida (a las 7:30 p.m.) cuando pensé que podía haber llegado. Tenía la esperanza de que no estuviera perdida en medio del océano que tuvo que atravesar. Me asomé al buzón, al final hoy no hubo nadie en casa, podía estar ahí. Y ahí estuvo. Quise abrirla de inmediato, quise esperar hasta la noche, antes de dormir para leerla, pero ni una de las dos ideas ganó. Después de comer la leí. Sorpresa. Sorpresa. Sorpresa. Ganas de regalar un abrazo a quien me la envió. No puedo creer que esté pasando algo así. Una persona tan especial...

Tengo que escribir sobre la FC

Cuando me enteré que me había quedado en la FC me sentí afortunada y algo extraña ¿y cómo es esa escuela? Fui a conocerla junto con Inés. Le dimos la vuelta, no sabíamos la forma corta de llegar. Salí desilusionada... siempre he sido una fachosa, pero lo veía normal en mí, no en todas las demás personas. Ver a gente fachosa, como que no se preocupaban por nada. El edificio tan gris. Yo acostumbrada a mi escuelita de monjas (ja), con sus jardincitos bien cuidados, el payasito del patio pequeño. Los salones con sus ventanas grandes, sus sillitas, el salón de ECOM, con su alfombra y los cojines... ¿qué decir? Pensé que era todo muy feo. Pensé en cambiarme, pero la otra opción ¿de qué me servía? Realmente no quería ir ahí, y al final me quedaría en el mismo lugar.

El primer día. Primero vi a Iris, luego a Mario. Nos metimos en el salón equivocado. Lo bueno es que Silvestre llegó tarde (el maestro de Química). Mis compañeros, gente peculiar. Hicimos buen equipo (un grupo que me gustó) al final de todo. Ahí los edificios grises comenzaron a tomar un tono familiar. Lo fachoso pasó a ser algo de todos los días y de todo mundo. Que había mucha gente poco fachosa, aclaro, siempre hay alguien, como aquella compañera a la que le dije "es que tú no te ensucias en nada, todos terminamos llenos de lodo y tú mírate!!!!" Jajajaja, y me enseñó su pantalón, con un poquito de polvo!!! jajajaja, no me burlé más de ella porque no nos llevabamos mucho, que si no....

Primer semestre, un trauma, preguntar qué hora es, querer salir de ahí, mi mente andaba en otras ondas. Ver a los matemáticos alucinar, a los físicos rebeldes. A los científicos locos. A Mario diciendo que era obsesivo y que tenía su vida perdida por tener 20 años y no haber hecho nada (porque los Nobel ya lo habían hecho a esa edad) Patearlo porque si estaba en el piso se podía patear (mi razonamiento lógico) Tomar provecho de todo, en las prácticas. Las fiestas. Yo fui a pocas, sólo a algunas de las prácticas. Pero bueno, eso nos dejó un gran conocimiento. Pocos no nos conocemos en las peores fachas, medio dormidos, medio ebrios, totalmente sucios o mojados. La que se sentía modelo, la de las confesiones. Caray!!! Muchas cosas. El ambiente gris estaba lleno de colores y de historias. Y yo en mi mundo. Ja!

Después, por andar en mi mundo... me fuí de ahí. Cuando regresé, me alegré de estar, pero ya todo mundo se había unido más. Aún así me sentí a gusto. Siempre encontré a gente interesante e inteligente. Dos personas en especial Liliana y Leo, para mí los más inteligente que conocí. Pero claro que no puedo olvidar a muchas otras personas, muchas, Lilia, la que me escribe del otro lado del océano, Aurora, el Dr. Limón (que se roba mis reflexiones... jajajaja), no sé, no terminaría de nombrarlos, hasta a Mariana la nombro, para que no digan. Muchas experiencias, que me gustaron. La huelga. Octavio. El 306. David. Aurora Z. Katy...

Realmente me relacioné con varias personas por Mariana, Mariana conoció a Lilia y Lilia conocía a mucha gente. Te mando un abrazo, quisiera que no te sintieras así, pero seguro es porque eres muy especial. A veces tuve miedo de que a tí o a Liliana les pasara algo parecido... no quiero que pase a mayores ¿Qué será de Liliana? ¿Doctora en filosofía de la ciencia? :D... más que eso.

Ahora también puedo enviar cartas a Leo, y recorrerán medio país :( Pero igual, estoy contenta. Él está contento. Luego conocí a gente en el museo. Mi mundo "del biólogo" se abrió más y alguien me hizo notar que no todos son realmente especiales (como me hizo creer Oscar -si el otro amor platónico-) sino que había cada gente que mejor ni decir que eran biólogos. Lo mejor es que tienen un título que dice que sí, y pronto maestros en ciencias. Quizás tuve la fortuna de conocer a gente excepcional. Por eso la FC no es gris para mí. Está llena de verde, de rojo, morado, azul, de flores, del 306, de agua, de noches platicando. Ahora el Tlahuizcalpan es otra cosa. Para mí es blanco. Para muchos será de colores.

Los quiero mucho, y se los dije en su momento. Ojalá no lo hayan olvidado.