Concepción-umbigo

En la panadería había tranquilidad, los cuernos, los bigotes, garibaldis, bisquets, bolillos, besos, mantecadas, chilindrinas, hojaldras, orejas, novias... todos platicando en paz y algunos a punto de dormir. De repente se escuchó a la escandalosa de la concha.

Todas las noches era lo mismo. Paseaba por todos los anaqueles gritando y bailando ¡¡¡Soy una concha, soy una concha, soy una concha!!! mientras se sobaba la panza en forma circular. La concha era la más presumida, por ser muy popular.

Los bigotes estaban hartos de ella. Y esa noche en particular, la concha no dejaba de bailar, brincar y gritar mientras se sobaba la panza haciendo círculos ¡¡¡¡Soy una concha, soy una concha, soy una concha!!!! Los bigotes le advertían "concha, ya cállate y déjanos descansar" y ella no hacía caso, seguía "¡¡¡ Soy una concha, soy una concha, soy una concha!!!" mientras se sobaba la panza.

Así siguió hasta que los bigotes consiguieron una escopeta, apuntaron contra la concha y le dijeron "te lo advertimos"... pum!!! un balazo en el centro de la concha, quien quedó inmóvil encima de una charola. Solitaria. Todos se imaginaron lo peor, cuando de repente la concha se levantó, vió que tenía un agujero en medio de ella. Y comenzó a cantar y a bailar sobando el "agujero" que tenía ¡¡¡soy una dona, soy una dona, soy una dona!!!


Foto: el ombligo de la Fiona, quien hace años me contó y actuó este chiste. Hasta ahora lo recordamos y nos botamos de la risa :D... La panza de la Fiona es peluda, fíjense en los vellitos...
Ella dice ¿Qué quieres que haga tía, si todos los muchachos guapos quieren conmigo? jajaja y es cierto (en parte).


Besos.