Hay muchas cosas que escribir hoy. Comenzaré por la que sucede ahora.
¿Alguna vez has tenido que leer un mensaje que te envian y que no quieres leer?
Eso está pasando ahora, le escribí a mi querida maestra Guille, quien me ofreció ayuda para lo del escrito prometido. Me disculpé primero por no haberle escrito de inmediato. Pretextos nunca me faltan. Ya me respondió... y es un e-mail muy largo. Me dan ganas de no leerlo. Lo leeré, pero después de postear :D luego les digo qué me dijo (¿dejaré de ser chismosa algún día?)
Otra vez me ganaron en el literati... mejor me enfoco al post.
Ayer fui a esa tienda departamental que dice que no es "el super" y claro, como cada año hay un montón de gente en ese tipo de ofertas de ropa interior, pero me quedé sorprendida al ver tal desorden y me pregunto el por qué. El espacio es un factor, pero más que nada es que haya tanta gente y ahora me hace recordar a ese libro de "Ensayo sobre la ceguera" de Saramago. ¿Así sería el mundo si nadie pudiera ver?
Caray! Las ideas se van... ¿Qué más iba a escribir?
Sobre la indecencia. Mi indecencia. Pues nada, que soy indecente. Esto lo dejo así hasta que me acuerde qué más les iba a decir.
2 comentários:
mmm buena analogia entre las ofertas de chones y el ensayo sobre la ceguera jiji... por un momento me imagine a las señoras de la tienda ciegas de ambision...
saludos azules
sigo leyendo....
¿¿Es usted indecente?? ¿de donde?
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