Ha llovido últimamente, no me atrevo a decir que ha llovido mucho, porque no lo estoy comparando con nada. Ha hecho frío.
Esta tarde vi el agua correr por el asfalto de mi ciudad... es mucha agua... no estamos en un bosque... los hidrocarburos la contaminan y nuestro sentido del gusto es muy sensible a su sabor. Esa agua no se puede usar para beber... así que el ciclo del agua se rompe, o al menos se atrasa.
La naturaleza es sabia y todo lo renueva. No soy ecologista, sí contribuyo en lo que puedo.
Al ver esta agua me dieron ganas de escribir algo bonito, nostálgico, algo como el recuerdo, como la añoranza de ciertos momentos, algo que cuando leas te sientas identificado, que sepas que me refiero a tí.
Sí, quiero estar junto a tí, ya te lo he dicho, no se puede por ahora, pero ya vendrá el momento, o las cosas seguirán como han sido. Los momentos que compartimos (sea de la forma en que sea) los disfruto y no los quiero cambiar. Tal vez debería hablar en tercera persona, para guardar cierta distancia.
Ya sé que eso de escribir bonito no es para mí... pero bueno, ya hice el intento.
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